Para un proyecto en Zellik, Bélgica, se han entregado sillas de espiga de fibra de vidrio.
Con muchas reacciones positivas de los empleados que los han colocado y colapsado. Las estanterías de espigas son más rápidas de colocar y mucho más estables. Además, no se pueden sacar los tacos de los bastidores durante el vertido. El problema de las cremalleras de acero es que las clavijas están sueltas en la cremallera, por lo que es fácil que se salgan.
La gran ventaja de estas estanterías de clavijas es que las clavijas son siempre 100% horizontales. Esto distribuye bien las cargas del tráfico y permite que los tacos hagan su trabajo.
A medida que sube el precio del acero, los productos de fibra de vidrio no sólo son más ligeros sino que también tienen un coste asequible.
